Traductores oficiales para cancillería, uno de los servicios más especializados
Una traducción puede ser el documento más importante en la vida de una persona
Una traducción puede ser el documento más importante en la vida de una persona. No es descabellado decir que gracias a una mala traducción pueden ocurrir cosas desastrosas. Cuando se necesita una traducción certificada, se requiere la mejor calidad. Pero en esos casos, siempre surge una pregunta ¿cómo saber que tengo un traductor certificado trabajando para mí?
Podemos empezar preguntando (o más bien, observando) algunas características: un traductor certificado posee mucha experiencia. Si bien para muchas personas podría resultar fácil aprender un idioma en 1 ó 2 años, para convertirse realmente en un traductor certificado la experiencia abarca, al menos, 5 años de trabajo reconocido por la Cancillería en cuestión. Un traductor oficial no sólo debe poder referir dónde aprendió del idioma, sino que debe poder demostrar que ha realizado cursos, actualizaciones y que ha tomado pruebas que le permiten certificarse en el trabajo y el idioma en el que lo va a realizar.
Otro aspecto a considerar si se busca un traductor oficial para documentos de cancillería es observar la consistencia en los trabajos. Es decir, que en los documentos que se le han solicitados se note que el uso del idioma no tiene variaciones. Por ejemplo, en el uso de lenguaje formal versus informal de acuerdo al requerimiento. No deben existir mezclas entre ellos.
Una tercera característica para observar es que los traductores certificados tengan la capacidad de entender terminología especializada. Hablamos de que un traductor certificado no está solo en la capacidad de traducir una conversación del día a día o una carta entre amigos, sino que es capaz de traducir documentos complejos con términos que hacen referencia a algunas áreas específicas como la médica, matemática, económica o el área legal. Todo debe hacerse sin fallas y permitiendo la comprensión del texto.
¿Cómo asegurarse de la calidad de trabajo de un traductor?
También podemos observar que un traductor certificado no utilizado un software para hacer la traducción. Si bien, obviamente se pueden buscar palabras para poder hacer una mejor traducción, un traductor certificado no enviaría todo su documento a un servicio por internet para luego simplemente acomodarlo. Esto denotaría falta de experiencia, compromiso y calidad en las traducciones. Las traducciones que son asistidas por máquina o por computadora son muy notorias, pues son literales y con mucha frecuencia se pierde el sentido del documento.
Un quinto aspecto para observar es el aseguramiento de la calidad. Un traductor certificado debe tener la capacidad de poder demostrar cómo realizó su traducción y certificar fue hecha de la mejor manera. El cliente tiene derecho a saber cómo funciona la traducción, cómo la hizo, y si fue hecha utilizando un método particular. Claramente, un traductor cerificado está en capacidad de poder responder estas preguntas de forma sencilla y explicar al cliente las herramientas que utilizó. De este modo, se asegura que no fue hecho por una máquina o incluso por otra persona.
Las traducciones oficiales como las que requieren en cancillería son traducciones especializadas, pues contienen términos del ámbito legal, laboral y administrativo que deben ser tratados con sumo cuidado para evitar confusiones y problemas mayores. Este tipo de traducciones oficiales debe provenir de un servicio que garantice su correcta traducción. Cuando ya se haya completado el trabajo, las traducciones deberán venir firmadas por una autoridad que indique su precisión y fidelidad para con el original.
La falla en una traducción para una instancia como la cancillería puede acarrear problemas legales debido a que la mayoría de veces dichos documentos contienen contratos que son necesarios para grandes empresas o para el trámite de muchos de muchos proyectos estatales.
En el caso de las traducciones para una cancillería, también se puede hablar de una traducción legal o apostillada, donde se adjunta una declaración de un notario público en la que se certifica que el documento es fiel al original.
Si estás buscando un traductor certificado que cumpla con todos los requisitos, se encuentre legalizado y esté listo para trabajar en documentos específicos que provengan de Cancillería, no dudes en ponerte en contacto con Tracendio. Somos la empresa líder en el mercado que te ayudará con todas sus dudas sobre traducción.